Mudo

mudo

la semana
pasada
despues de
confrontar
los aguaceros
y las horas
perdidas
entre los
muros de
las iglesias
los domingos
a las 7 am
con un raton
en el cuerpo
le di
forma
al
silencio
sellando
mis labios
con un
laberinto
de
botellas de cerveza
y vomito
frente
a las antiguas
casas de lenocinio
que aun
se mantienen
 de pie
esta mañana
mientras esmeralda rincones
riega las matas
e insulta al
viejo
que le aguarda
frente a
la ventana
de su habitacion